sexta-feira, 9 de maio de 2008

Ó Coimbra


No hago otra cosas que pensar en ti.
En las sensaciones vividas contigo.
Me has visto crecer y amar.
Has llorado conmigo cuando me dolía el corazón
y te he sentido arroparme.

Todo este tiempo has estado en silencio
consciente que ya hablabas en mi interior.
Tu voz rotunda y frágil.
Resuena en unos sentimientos en espirarles que dan vueltas y vueltas,
haciendo que sonría y sienta,
ni tristeza ni pena,
solo alegría con melancolía de esos días.
Sé que todo creció conmigo junto a ti.
Dulce para el aniversario de los 22 años.
Arena, sol y agua acuden al festín del día señalado y lleno de alegría.

¡Oh Coimbra!
Tierra de saudades,
madre de sueños y festejos.
Segundo hogar.
¿Qué ojos, pies y almas caminan, ven y sienten entre tus brazos?


(Dedicado a mi amigo Antón Coimbra)

EleNa Martín.

2 comentários:

Anónimo disse...

hemos sentido lo mismo
no exagera tu voz
ni menos ni más
esa tierra amable al corazón
irremediablemente irresistible irreemplazable
ahora sé elena
sin el menor atisbo de duda
que debemos volver.

Anónimo disse...

GRacias Antón?

Una parte de mi, quedó en esos días en esa ciudad. Y creció conmigo a la distancia y en otros lugares donde siempre me gustaría volver. Y todo por conocer y saborear y sentir, y palpar la palabra y su significado SAUDADES.
Quien crece en una ciudad a pesar de estar lejos de su casa. Guarda en su corazón la melancolia y la felicidad de sertirse vivos.

EleNa.